19
Fri, Apr

La minería presente en el mundial de fútbol Brasil 2014

Actualidad
Typography
  • Smaller Small Medium Big Bigger
  • Default Helvetica Segoe Georgia Times

Pueden parecer incompatibles, pero en la mayor fiesta mundialera la minería será un factor fundamental para el desarrollo del torneo.

La cuenta regresiva ya terminó. Llegó junio, y con ello, la mayor cita futbolística del planeta. El Mundial ya se vive en Brasil, convocando a una multitud de fanáticos de todo el mundo, y a otros millones que siguen el destino de sus selecciones a la distancia, pegados al televisor.

Durante un mes, gran parte del planeta estará pendiente del balón y de todo lo que rodea a esta mega fiesta mundial. Pero habrá también un invitado menos visible y más silencioso, aunque fundamental en muchos aspectos para la Copa del Mundo: los minerales.

Desde los modernos estadios que albergarán los partidos hasta la alimentación que consumirán a diario los futbolistas, la minería también dejará su huella en Brasil 2014. ¿Cómo? Averígüelo a continuación.

Zapatos

Los zapatos de última generación que se utilizan en el fútbol responden mejor a la alta exigencia a la que son sometidos gracias a una serie de minerales que están presentes en su confección.

Por ejemplo, para lograr un buen agarre y estabilidad, los toperoles se fabrican con zinc y otros metales. Bórax, sal, cromo, y el azufre se utilizan en la preparación del cuero de los zapatos. En tanto, el molibdeno y el titanio se utilizan para ayudar a estabilizar la suela.

Estadios

Los modernos estadios que se construyeron especialmente para el Mundial requirieron para su construcción otra gran cantidad de productos a base de minerales, entre los que destaca el acero (hierro, zinc, molibdeno, etc), hormigón (caliza, arcilla, yeso y áridos), vidrio (arena de sílice y feldespato), baldosas (arcilla y feldespato), aluminio y piedra.

Cancha

Para el campo de juego, el pasto muchas veces requiere de fertilizantes hechos de potasio (KCl), otro mineral presente en Brasil 2014.

Copa del Mundo

Es lo que todos quieren: el ansiado trofeo que simboliza al campeón del mundo. Diseñada por el italiano Silvio Gazzaniga en 1974, la Copa del Mundo está fabricada con cinco kilos macizos de oro de 18 quilates con una base de malaquita. Mide 36,8 cm de altura y pesa 8,175 kg. Sin embargo, últimamente se ha puesto en duda que la copa sea de oro macizo, ya que si fuera así, pesaría cerca de 80 kilos. Lo más probable es que el trofeo sea de un material más ligero, pero recubierto de oro puro.

Sedes del mundial

Las reservas más importantes de hierro de Brasil descansan en el centro del Estado de Minas Gerais, lugar donde se ubica Belo Horizonte, una de las 12 sedes del mundial. Asimismo, Fortaleza, municipio que acogerá 4 partidos de la primera fase de este encuentro deportivo, posee importantes reservas de níquel.

Balones de cobre

Veinticinco balones de cobre llevará la selección chilena al mundial de Brasil para entregar a directivos del fútbol de aquellos países con quienes se estará disputando esta fiesta deportiva. Los balones fueron elaborados con láminas de cobre electrolito por reclusos del Centro Penitenciario de Colina, en el marco de reinserción laboral que Codelco ha desarrollado en este lugar.

Monedas conmemorativas

El Banco Central de Brasil presentó una serie de monedas conmemorativas con motivo del torneo mundialista, la cual consta de una moneda de oro, dos de plata y seis de cobre y níquel, que podrán ser adquiridas por los aficionados en las sedes del banco emisor del país carioca. La moneda más exclusiva es una pieza de oro de 16 milímetros de diámetro, la cual será vendida a un precio unitario de US$491.

Iluminación

Los estadios del mundial contarán con iluminación LED. Pensando en el impacto ambiental que significa este encuentro deportivo, las autoridades decidieron instalar paneles solares y turbinas eólicas para iluminar los modernos estadios de Brasil. Por ejemplo, el estadio Maracaná instaló una planta eléctrica de generación solar, con capacidad para generar hasta 500 megavatios por hora al año, lo que sería capaz de cubrir el consumo anual de 240 residencias.

Fuente:  Revista Nueva Minería y Energía