Chuquicamata celebra sus 100 años mirando al futuro

Actualidad
Typography
  • Smaller Small Medium Big Bigger
  • Default Helvetica Segoe Georgia Times

El presidente ejecutivo de Codelco ha destacado que después de un siglo de explotación el yacimiento tiene cerca del 60% del mineral que había originalmente. Bajo el actual rajo habría unos 1.700 millones de toneladas en reservas.

La mina de cobre a rajo abierto más grande del mundo cumple hoy 100 años de existencia con la mirada puesta en un promisorio futuro subteráneo.

En 1882 se instaló la primera faena industrial y el campamento Chuquicamata se empezó a construir entre 1911 y 1912 para abrir sus puertas el 18 de mayo de 1915. Ese año la empresa estadounidense Guggenheim Bros produjo la primera barra de cobre fino. La localidad llegó a albergar a 25.000 habitantes entre trabajadores, jefes y obreros.

Después de 14 años de explotación, la Chile Exploration Company vendió sus derechos a la Anaconda Copper Company, empresa que operó el yacimiento hasta 1971, cuando se promulgó una reforma Constitucional mediante la cual se nacionalizó la gran minería del cobre en Chile. La mina pasó a manos del Estado chileno que hoy impulsa una ambiciosa inversión de USD 4.200 millones para convertir a Chuquicamata en una gran operación bajo tierra.

El presidente ejecutivo de Codelco, Nelson Pizarro, ha destacado que “después de 100 años de explotación (el yacimiento) aún mantiene alrededor del 60% del mineral originalmente existente”. Bajo el actual rajo, ubicado 1.600 km al norte de Santiago, en medio del desierto de Atacama, se han cuantificado cerca de 1.700 millones de toneladas en reservas de mineral de cobre (ley 0,7%) y molibdeno.

Por eso Codelco determinó que la mejor opción técnica y económica era explotar esas reservas a través de la construcción de la mina subterránea, cuya puesta en marcha está programada para el año 2019. Gracias a su construcción se generarán 6.000 empleos directos y otros 18.000 empleos indirectos. Se estima que en régimen Chuqi subterránea logrará una producción de 366.000 toneladas de cobre fino y más de 18.000 toneladas de molibdeno fino al año.

La iniciativa es parte de los denominados proyectos estructurales que Codelco impulsará en los próximos 10 años, con inversiones por alrededor de USD 25.000 millones. Además está proyectado realizar importantes inversiones en la actual concentradora y para adecuar la fundición de Chuquicamata a las características minerológicas del concentrado que se extraerá en la operación subterránea.

Para conmemorar el centenario de la mina, el campamento reabrió por algunos días sus puertas. Estas se habían cerrado el 2007 ante la necesidad de darle más operatividad a la mina y resguardar la salud de sus habitantes, por los efectos del plomo y otros desechos mineros.

Desde entonces Codelco ha sostenido un plan de manejo que allanó el camino para que se declarará Zona Típica, preservando y resguardando el casco histórico y sus edificios.

Fuente: Portal Minero